Una viejecita se sube al autobús cargando una rara bolsa de papel entre las manos, el pasillo del vehículo es estrecho y esta lleno de pasajeros.
La viejita se dirige sonriente hacia los pasajeros.
- ¡Cuidado con los huevos! ¡Cuidado con los huevos!, al tiempo que avanza al interior y nuevamente -¡CUIDADO CON LOS HUEVOOOOS!
En eso un parroquiano le pregunta dulcemente:
- ¿Lo que tiene en la bolsa son huevos?
- ¡¡Nooo... son alfileres!!!
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